El amor es ese país siempre tercermundista. Una república sujeta a dictaduras y a cracks financieros y a revoluciones y a sequías y a epidemias. Un reino donde tarde o temprano hay un terremoto, donde siempre alguien saldrá caminando por entre las ruinas y las llamas, sin poder entender qué es lo que ha sucedido y por qué a mí ¿eh?
Fresán, Los jardines...
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